Aldeas Infantiles SOS se basa en cuatro principios fundamentales, los cuales son la Madre, los Hermanos, la Casa y la Aldea.
]Los niños y niñas son acogidos en una familia liderada por una Madre que sustituye en su lazo afectivo permanentemente y le proporciona la seguridad que necesitan. La Madre asegura el cuidado y desarrollo de los niños y niñas, llevando su familia en forma independiente. Ella reconoce y respeta los antecedentes familiares, sus raíces culturales y su religión. También se capacita permanentemente y cuenta con el apoyo de colaboradores pedagógicos que respaldan su labor.
Hermanos
En cada familia vive una Madre con un grupo aproximado de ocho niños y niñas de distintas edades que crecen juntos. Los hermanos biológicos permanecen unidos en la misma familia. Los niños y niñas y su Madre, establecen lazos emocionales que perduran toda la vida. Estos niños y niñas que son acogidos en una familia son derivados a través del Juzgado de Menores. Muchos son huérfanos, o tienen padres que no pueden ocuparse de ellos.
La Casa
Cada familia tiene su propia casa, la cual representa para los niños y niñas su nuevo hogar estable, en el cual disfrutan de seguridad y pertenencia. Los niños y niñas crecen y aprenden juntos, compartiendo responsabilidades y aspectos de la vida cotidiana que crean el marco adecuado para el desarrollo de sus relaciones familiares. Cada casa disfruta de su propio ritmo de vida y actividades cotidianas.
] La Aldea
Es una comunidad formada por doce casas familiares. La Aldea constituye el puente de integración de los niños y niñas hacia la comunidad externa, a través de una vida normal, con vecinos y amigos, practicando deportes y estudiando en los colegios de la zona. Cada Aldea es liderada por un director y un Comité de Aldeas formado por las mismas madres. El Director de la Aldea acompaña a las Madres y vela por el cumplimiento de los principios que sustentan el modelo, además de formar importantes vínculos con la comunidad local.